Pues una vez mas, pude mostrar mi obra en mi conocida, querida, familiar y añorada Utrera, y familiar porque un antepasado de la familia dejó señas de su buen hacer artístico, con la emblemática veleta de la Iglesia de Santiago, y Yo ya de adolescente, andaba por sus calles. Y todo ha sucedido con el cariño y entusiasmo y buen hacer del equipo de Photomercado, primera edición en este año, que promete siga en lo sucesivo, no dudándolo el que suscribe en absoluto, porque con esas ganas, todo se consigue...
Muchísimas gracias amigos.
Rogelio Camargo.